Nostalgia

26.03.2023

Ahora mismo estoy evocando un retazo del ayer. Ese estado de ánimo que se hace presente en algún momento de nuestras vidas y que duele al principio, pero ayuda a sanar después.

A veces vías de escape cuando existe un presente complicado y/o habitado por problemas. La melancolía nos lleva a navegar entre los sentimientos…

Tardes de soledad delante del ordenador en las que percibimos el olor a playa, a aceite bronceador y nos vamos al Mediterráneo… cerramos los ojos, nos sumergimos en el agua fresca con sabor a sal, salimos mojados para tumbarnos bajo el astro rey y sentimos el calor abrasador de los meses estivales en los que no miramos el reloj.

"Tardeamos" en una terraza en la que se aprecia el bullicio de las ciudades llenas de nuevo. Comienza a caer el sol del incipiente otoño y en esas tardes amarillentas en las que la luz nos avisa que los días se nos van haciendo más cortos, soñamos con el siguiente verano que queda ya atrás...

Las calles están engalanadas para recibir una nueva Navidad donde nos reunimos un año más para celebrar la vida de los que quedamos. Brindamos por lo que fuimos, somos y seremos. Expectantes porque la vida comienza de nuevo un primero de enero y sabemos que nos depara nuevos horizontes.

Hoy, nos levantamos con la ilusión de que a partir de este momento, nuestros días son más largos y los podemos disfrutar más.

Y yo aquí, un año más, estoy sentada viendo pasar el ciclo de la vida. Mi cabeza vuelve a viajar a ese olor a mar y a libertad.