Noches de agosto a ritmo de jazz

Este bello dibujo, que seguro que os gusta tanto como a mí, es un regalo de mi amiga, ilustradora y escritora, Susana Aguilera. Esta delicia impresionista que refleja una noche estrellada en el corazón de Madrid, concretamente en la plaza del Ángel y todavía más específicamente, en el Café Central, define perfectamente lo que vais a leer en mi nuevo retoño que verá la luz en un mes aproximadamente.

Un proyecto, que aunque se ha escrito en ocho meses, lleva fraguándose una vida. Esta era una novela que me encontraba en la obligación de escribir. Algunos de los personajes que aparecen en ella son habitantes de mi vida real. Mi tía Victoria existió de verdad y vivía en la calle Arriaza. A mí me encantaba irme a escribir a su casa con aquel café tan rico que me preparaba, y con ella y su marido, mi tío Delfín, y mi hermano David leíamos poesía y a los clásicos. En aquella diminuta casa cercana a la estación del Norte comenzó mi amor por la literatura.

También la música es un puntal en la novela. Esto viene del piano que había en casa y sonaba en las tertulias, que había muchas, y por mi fascinación por el jazz, que es una música cargada de magia, que te transporta a donde tu quieras...

La protagonista Victoria es un personaje totalmente ficticio, pero algunas de las experiencias, lugares o viajes me ocurrieron en realidad.

Han tenido que pasar dos novelas para que emprendiera esta empresa que me rondaba por la mente desde hace mucho tiempo.

La literatura es maravillosa porque te permite viajar en el espacio y en el tiempo y a medida que vas escribiendo, vas cambiando, reconstruyendo, hilando, haciendo y deshaciendo lo que te apetece.

Mientras iba escribiendo, me iba poniendo en la piel de Victoria, la protagonista, y ha sido muy fácil porque yo viví una época dorada de la ciudad de Madrid y un resurgir de este país.

Ahora si puedo compartir con vosotros la sinopsis de la novela y además deciros que estaré con ella en la Feria del libro de Madrid con mi editorial Esstudio Ediciones. Os iré informando de todo porque es un sueño hecho realidad. Deseando tenerla entre mis manos.

Madrid, año 1993. Una tórrida noche de agosto, Victoria, Filóloga y escritora, se encuentra escribiendo una novela en su casa y ante el bloqueo, decide irse al Café Central, mítico club de Jazz, a escuchar música y despejarse un poco. Esa noche ocurre algo inesperado, apasionante y mágico.

Partiendo de ese punto, viajamos en el espacio y en el tiempo. Desde la convulsa Cuba de los años 50, en puertas de una revolución, pasando por el París de los años 60, con parada en el "Mayo del 68" para volver al Madrid de los años 90, sin dejar de lado los animados años 80, años de la "Movida madrileña".

Los personajes de esta novela de encuentros y desencuentros se entremezclan entre sí para confluir en un final donde nada es lo que parece…

Quería compartir con vosotros, lectores, estas líneas para haceros más participes de Noches de agosto a ritmo de Jazz.